El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 de la compañía Malaysia Airlines que se dirigía de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue alcanzado por un misil cuando sobrevolaba la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, nadie sobrevivió de las 298 personas, en su mayoría holandeses, que viajaban a bordo de la aeronave.
Los participantes del conflicto en Donbás niegan su culpa echándola cada uno a la parte opuesta.
"Se confirma lo que estábamos observando en la etapa inicial de la investigación de la catástrofe del MH17, con la diferencia de que ahora eso se declara oficialmente del nombre del fiscal general de Países Bajos", dijo la portavoz agregando que se refiere "a la actitud preconcebida hacia Rusia y el carácter selectivo al extremo de la creación de la base de pruebas".
El señor Westerbeke pone en duda la aspiración de Rusia "a cooperar de verdad", reveló.
Señaló que tales declaraciones son injustas en sumo grado, dado el colosal volumen de datos que Rusia suministró a los jueces de instrucción, así como recordó que Países Bajos figuró entre quienes negaron a la parte rusa la posibilidad de convertirse en miembro de pleno derecho del Equipo de Investigación Conjunto.
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"Queremos indicar por enésima vez que Ucrania es la parte interesada y al concederle el derecho a ser miembro oficial del Equipo de Investigación Conjunto, se le regaló la posibilidad de influir sobre los resultados de la investigación", declaró la portavoz.
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Tras señalar que Rusia siempre se ha pronunciado a favor de investigar de modo minucioso y desinteresado las circunstancias de esta horrible tragedia y sigue abierta para ayudar a la investigación, la diplomática subrayó que Moscú cree "importante volver a instar a la parte holandesa a tomar nota obligatoriamente de los datos rusos antes de hacer conclusiones definitivas".