"Se detectaron 13 atentados de los cuales 12 fueron prevenidos en la etapa de preparación", dijo Buksman.
Añadió que "aumentó un 60% el número de casos detectados de apoyo a las actividades terroristas, reclutamiento a las organizaciones terroristas y financiación del terrorismo".
El atentado que no se logró evitar se produjo el pasado 3 de abril en el metro de San Petersburgo y provocó 16 muertos, incluido el terrorista suicida, y decenas de heridos.