Un radar de tráfico de la ciudad de Oriol fotografió un Ford Focus que iba a una velocidad muy superior al límite permitido en este tramo. La sorpresa vino al comprobar que, según el sistema de monitorización, el vehículo se movía a unos increíbles 1.418 km por hora.
En otra ocasión, una cámara de tráfico en Tataristán detectó un Hyundai que iba por encima del límite de la velocidad permitida, pero el vehículo se movía a solo 22 km por hora. Lo más interesante es que durante este incidente, el vehículo estaba siendo llevado en el remolque de un camión, lo que imposibilitaba al Hyundai violar ningún tipo de norma de tráfico.
Según la Fiscalía General de Rusia, los posibles errores del sistema se tienen en cuenta y este tipo de 'infracciones' no son multadas.