"Vemos un vertido de acusaciones inapropiadas e inadecuadas que volvieron a inundar los medios de EEUU. Uno solo puede sorprenderse ante estas acusaciones infantiles e infundadas que están mucho más allá de la realidad", dice la nota de la misión diplomática rusa.
En las misivas se puede observar cómo el partido favoreció a Hillary Clinton en las elecciones primarias y buscó desacreditar a su principal contrincante, el senador por Vermont, Bernie Sanders.
Una de las estrategias planteadas por el Partido Demócrata era poner énfasis en los orígenes judíos de Sanders y su agnosticismo para alienar a los votantes demócratas sureños en favor de Clinton.
Representantes de la sede electoral de Trump negaron categóricamente esta información.
El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a su vez declaró en una entrevista a la NBC que no hay motivos para creer en una supuesta 'pista rusa'.
"No hay evidencia alguna de ello. No revelamos nuestra fuente y, por supuesto, es un intento de confundir el asunto que promueve la campaña de Hillary Clinton".
Lo que realmente importa, indicó, es el contenido de las misivas infiltradas que "revelan una conspiración en la cúspide del Partido Demócrata".