Los protagonistas del cortometraje son un padre y su hijo, habitantes de la capital crimea de Simferópol. Ante sus ojos transcurre la historia alternativa de la península desde marzo de 2014 y hasta el día de hoy vista a través de las noticias.
Al ser interrumpido el referéndum, el presidente interino Alexándr Turchínov anuncia un estado de emergencia en el territorio de Crimea y despliega las tropas en la península.
Según la trama, el canciller ruso Serguéi Lavrov declara la "no interferencia en los asuntos internos de Ucrania".
Reina la violencia, especialmente en contra de la población rusa de Crimea, y la incertidumbre. De vez en cuando surgen protestas, que son socavadas a golpes por los combatientes del movimiento extremista ucraniano Pravy Sektor (Sector Derecho en español, organización proscrita en Rusia). El noticiero anuncia el incendio en la Casa de los Sindicatos de Simferópol. De hecho, en el vídeo-crónica aparecen las imágenes de la tragedia ocurrida en la Casa de los Sindicatos de Odesa el 2 de mayo de 2014.
La alianza militar formada por Ucrania y Georgia inicia la operación contra Abjasia y Osetia del Sur. Los ciudadanos de Crimea completan las filas del Ejército enfrentado por Rusia. Quienes manifiestan su desacuerdo son juzgados por el tribunal militar como 'desertores'.
Los patriotas de la península forman milicias, y se desencadena una lucha armada contra las autoridades ucranianas, similares al conflicto en Donbás.
Por último, el hijo apaga el ordenador para sumarse a los milicianos.
Una alarmante historia, que, afortunadamente, jamás ha tenido lugar en Crimea.
"Estamos en junio de 2016. ¡Nos alegra poder contarle noticias diferentes!", señala el locutor.
Finalmente, aparecen miles de crimeos que se han congregado para celebrar en las plazas de la península el Día de Rusia junto con el resto de la nación.
El día de Rusia es una fiesta que conmemora la aprobación de la declaración sobre la soberanía del país y se celebra el 12 de junio desde el año 1992.
Crimea y Sebastopol se reincorporaron a Rusia en marzo de 2014 tras un referéndum en el que la aplastante mayoría de los habitantes votó a favor de la reunificación.
