"Entre todas las industrias las pérdidas han alcanzado más de 900 millones de rublos", señaló.
También indicó que el vice primer ministro de Rusia, Dmitri Rogozin, ordenó examinar la posibilidad de indemnizar los daños.
La península de Crimea sufrió un apagón masivo el 22 de noviembre, cuando fueron dinamitadas las líneas de alta tensión que abastecían de electricidad de Ucrania. El 8 de diciembre Ucrania restableció los suministros por una de las cuatro líneas existentes. El 30 de noviembre el abastecimiento volvió a cortarse.
En diciembre, Rusia puso en marcha dos líneas de suministro eléctrico a Crimea a través del estrecho de Kerch.
Está previsto que otras dos líneas entren en servicio entre abril y mayo de 2016, lo que permitirá a la península independizarse de los suministros del territorio ucraniano.
