"Nuestra industria se adaptó, es difícil decir qué quiere conseguir la Unión Europea con estas acciones", afirmó Mantúrov en una entrevista a RIA Novosti.
Agregó que probablemente se debe a que "Occidente no puede inventar nada nuevo".
"Sí es caro, pero tenemos medidas de apoyo por parte del Estado para compensar la tasa de interés de los préstamos, financiación de los proyectos, estamos lanzando un mecanismo de arrendamiento financiero prioritario para el equipo técnico", afirmó.
Tras la reunificación de Crimea y a raíz del conflicto en el Este de Ucrania, EEUU, la UE y otros países occidentales aprobaron varios paquetes de sanciones contra ciudadanos, empresas y sectores enteros de la economía rusa, que posteriormente fueron prolongadas hasta el 31 de julio de 2016.
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Moscú respondió a estas medidas con una restricción de las importaciones agroalimentarias de esos países.