En la ceremonia de apertura de la Mezquita Mayor de la capital participa el presidente del Consejo de los Muftíes de Rusia, Ravil Gainutdin, además del jefe de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, embajadores europeos, representantes de las religiones tradicionales.
"De todo corazón les felicito por la reapertura de la Mezquita Mayor de Moscú, es un gran acontecimiento para todos los musulmanes de Rusia", señaló el mandatario ruso.
Además, señaló que "el Islam, según la legislación rusa, es una de las confesiones tradicionales".
La Mezquita Mayor de Moscú, tras su restauración, multiplicó por 20 su superficie, ocupando ahora más de 19.000 metros cuadrados, con capacidad para 10.000 creyentes.
El templo, de seis plantas, dispone de siete ascensores y todo lo que necesitan los feligreses, incluyendo equipamiento para discapacitados.
La altura de la cúpula principal es de 46 metros y su diámetro, de 27 metros.
Según datos ofrecidos por el Consejo Muftí, en la construcción se invirtieron alrededor de 170 millones de dólares, donados por los creyentes.
La comunidad musulmana de Rusia, según Gainutdin, asciende a los 20 millones de personas.