Asimismo, el vice primer ministro exhortó a que "se dé una respuesta adecuada a las sanciones", que calificó de "hostiles".
Rogozin señaló además que a causa de las sanciones Rusia se encuentra con dificultades de obtener ganancias de las exportaciones de armas.
“Las sanciones, que afectan al sistema financiero de Rusia,” obstaculizan la obtención “del dinero que ganamos realmente al vender el armamento”, dijo precisando que “desde luego, hemos encontrado una solución” del problema.
Al mismo tiempo, el vice primer ministro no reveló los detalles de este remedio.
Rogozin añadió que Rusia “gana casi 1.500 millones de dólares anualmente” al exportar armas.
Según la exportadora rusa de armas Rosoboronexport, la compañía en 2014 exportó armas y material bélico por valor de 13.200 millones de dólares a pesar de las sanciones occidentales y espera el mismo resultado en 2015 y 2016.
La cartera de pedidos de la exportadora rusa de armas Rosoboronexport asciende a día de hoy a 39.000 millones de dólares.
Las relaciones entre Moscú y Occidente empeoraron a raíz de la crisis en Ucrania y, en particular, tras la adhesión de Crimea a Rusia que tuvo lugar hace un año y que los países occidentales califican de "anexión ilegal".
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú, incluyendo un embargo de armas junto con la prohibición de exportar piezas de doble uso militar y civil y tecnología clave para explotar recursos energéticos.
También restringieron la financiación a medio y largo plazo a varios bancos con participación pública y aplicaron sanciones contra varias decenas de ciudadanos rusos.