El presidente ruso, Vladímir Putin, propuso reorganizar el recinto del Kremlin de Moscú con el fin de hacerlo más atractivo para el turismo y expuso su proyecto al alcalde de la capital, Serguéi Sobianin.
También dijo que “es necesario debatir este plan con los arquitectos de Moscú y coordinarlo con la UNESCO”.
Se trata, en particular, de reconstruir dos monasterios. Uno, fundado en 1365, fue testigo de muchos acontecimientos históricos. En 1812 allí radicó la plana mayor de Napoleón. En el recinto del monasterio fueron sepultados jerarcas de la Iglesia Rusa, príncipes, boyardos y otras personalidades.
Otro convento se fundó en 1386 y durante el Medievo se utilizó como residencia de las novias del zar antes de celebrarse las bodas y también como el último reposo de las mujeres de la estirpe de los grandes príncipes.
Además, se prevé acondicionar una zona verde, restaurando esculturas y monumentos arquitectónicos antiguos.
La propuesta de abrir las puertas de la Torre de San Salvador, para que el público pueda entrar en el Kremlin desde la Plaza Roja, podría realizarse próximamente.
