Una nueva ley promulgada hoy por el presidente ruso Vladímir Putin eleva de 10 a 15 años la pena máxima por organizar disturbios públicos, además de castigar con cadena perpetua varios delitos terroristas.
La normativa, adoptada en medio de la crisis en Ucrania donde los disturbios callejeros derivaron en un violento cambio del régimen en Kiev y provocaron numerosas víctimas en las regiones del sureste, también autoriza a los agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB) a realizar la revisión de individuos, sus vehículos y efectos personales, además de documentos de identidad.
La organización de disturbios públicos con violencia acarreará penas de 8 a 15 años de prisión. La autoría intelectual y el financiamiento del terrorismo se castigarán con una pena de 15 o 20 años de cárcel o hasta cadena perpetua, lo mismo que la formación de terroristas, la toma de rehenes y el secuestro de una aeronave o un tren.
