El Tribunal Municipal de Moscú dio por primera vez la custodia de hijos de un padre ruso a una madre extranjera, Rachael Neustadt, que es ciudadana británica.
Durante el divorcio el Tribunal Supremo británico dictaminó que los dos niños, Daniel y Jonathan, de cinco y nueve años, se quedarían con la madre. Sin embargo, su padre, un ciudadano ruso cuyo nombre no se comunica, retuvo a los hijos en enero pasado cuando fueron a verle durante las vacaciones navideñas.
“El Tribunal Municipal de Moscú sentenció que la decisión del Tribunal Supremo del Reino Unido es aplicable en el territorio ruso. Por lo tanto, el padre está obligado a devolver los hijos a la madre”, dice el comunicado del juzgado.
Los abogados de Neustadt citaron en la demanda la Convención de la Haya de 1996 sobre Protección del Niño que en Rusia entró en vigor el 1 de junio de 2013 y por primera vez se aplicó en este caso.
Los hijos de Neustadt tienen la nacionalidad rusa y británica. Daniel también es ciudadano de Alemania. Los dos niños nacieron en Suiza y en enero de 2011 se mudaron a Londres junto con sus padres. Dos meses después la mujer acusó a su marido de violencia de género y pidió el divorcio.
