Solo el 8% de los rusos son partidarios de que familias extranjeras adopten niños en Rusia y otro 39% lo vería bien, siempre y cuando se endureciera el seguimiento posterior, según se desprende de una encuesta realizada por el Centro Levada.
De acuerdo al sondeo presentado este miércoles por el director del centro, Lev Gudkov, el 22% de los encuestados aprobaría una adopción internacional solo en casos extremos y el 25% opina que estas adopciones se deben prohibir totalmente. Al mismo tiempo, solo el 4% dijo estar dispuesto a adoptar un niño.
El debate sobre las adopciones internacionales volvió al orden del día en Rusia tras aprobación de la polémica Ley Dima Yákovlev, que prohíbe a los ciudadanos de EEUU adoptar niños rusos. Según el estudio del Centro Levada, la mitad de los rusos apoyan la norma, mientras que uno de cada tres la rechaza.
Por otro lado, el 55% de los encuestados está a favor de simplificar los trámites para la adopción nacional. Además, el 18% pidió un aumento del gasto público en los orfanatos.
Entretanto, según otro sondeo llevado a cabo a mediados del mes por el estatal centro VTsIOM, el 76% de los rusos aprueban la Ley Dima Yákovlev y el 53% se muestran partidarios de la prohibición total de las adopciones internacionales.
La Ley Dima Yákovlev entró en vigor el pasado 1 de enero tras ser aprobada en represalia por el Acto Magnitski que sanciona a un grupo de funcionarios rusos por supuestas violaciones de derechos humanos.
La norma, bautizada en honor a un niño ruso de dos años muerto en EEUU por negligencia de su padre adoptivo, fue criticada en un principio no solo por los sectores más liberales, sino también por varios altos cargos del Gobierno ruso, como su vicepresidenta, Olga Golodets, el canciller Serguei Lavrov.
