El experto explicó que la teología actual "es más prudente" que en épocas anteriores y entiende la resurrección de Jesucristo como un proceso simbólico, que demuestra que la "muerte nunca es definitiva para los cristianos y ello poco o nada tiene que ver con la muerte física".
Sin embargo, "la Iglesia oficial y ortodoxa del Vaticano sigue defendiendo la resurrección de Jesús en 'cuerpo y alma'", añade el experto. Por esta razón, no deberían existir restos materiales de Cristo en la tumba que se encuentra situada en la Ciudad Vieja de Jerusalén, informa el medio.
No obstante, incluso en caso de encontrar un cadáver en la tumba del Mesías, "sería imposible demostrar que se trata de la verdadera tumba de Cristo crucificado". Esto podría generar nuevas preguntas, pero la fe cristiana no tendría que verse afectada por los descubrimientos que puedan hacer los científicos, dice para concluir el experto.