El modding se refiere tanto a la personalización del hardware como del software. En el primer caso incluye desde aspectos de utilidad y funcionamiento, como invertir en una buena fuente de alimentación (PSU), hasta la iluminación y las plantillas de vinilo para crear diseños originales. El segundo implica la modificación de los videojuegos y sus personajes.
Esta tendencia se hizo popular en los últimos dos años, cuando las computadoras para gamers retomaron su popularidad, que había sido desplazada por las consolas.
"Los gamer son vanidosos y quieren personalizar su computadora de una forma única. Cuando van a un 'LAN party' la gente admira sus máquinas. Hay un aspecto técnico que brinda beneficios a nivel del juego, pero cuando se trata de los colores y la iluminación, es un asunto de vanidad", señaló Ricardo Vidal, director de ventas de Micron Technology.
En relación al modding de software, según Vidal es una tendencia que se va a hacer cada vez más popular pero que roza la ilegalidad ya que implica adentrarse en el funcionamiento de los videojuegos y modificarlos, algo que no aprueban sus creadores.
"En casi todos los juegos el usuario puede diseñar su personaje como quiera. Pero también hay gente que está ingresando al programa como tal y modificándolo. Esto es como hacerle un hacking al videojuego para beneficio del gamer", agregó.