Las mujeres negras siguen siendo las más oprimidas

Las mujeres afrodescendientes sufren una triple discriminación: por raza, género y clase. Además, son las que realizan los trabajos más difíciles y peor pagos, con relación a mujeres y hombres blancos. También son objeto de la mayor violencia, tanto sexual como institucional. Hablamos con dos especialistas sobre el tema.

Brasil es uno de los países con más población negra en la región, y uno de los más letales para las mujeres en el mundo. En 2016, cada dos horas una mujer fue asesinada por violencia de género, de acuerdo al Anuario Brasileño de Seguridad Pública. En el Encuentro Feminista de América Latina y el Caribe (EFLAC) que se realizó en Montevideo, se abordó el tema con una gran presencia de representantes brasileñas junto a otras mujeres del continente.

Sobre esto conversamos con la coordinadora y abogada uruguaya Giovanna De León, integrante de la Red de mujeres afrodescendientes, latinoamericanas, y de la diáspora. Y con Adela Panezo, directora ejecutiva de la organización Centro Familiar Afro Santeño de Panamá.

"Somos discriminadas porque somos negras, porque somos mujeres, y porque generalmente somos pobres. Es una interconexión que se da entre las formas de discriminación racial que se da en todo el mundo, y que las mujeres la sufrimos de manera triple. Y contra eso tenemos que luchar. Incluso con los privilegios que tienen las mujeres blancas. Porque nosotros empezamos desde un escalón más abajo", explicó Giovanna De León.