El golpe de Estado fue organizado por una coalición formada por el viejo ejército kemalista (defensor de la laicidad y que en los 80 abrió las puertas al neoliberalismo) y la secta de Fetullah Gülen que se ajusta al neoliberalismo con un matiz místico.
“El ejército sólo no hubiera podido hacer nada. La secta de Gülen es una buena base porque está muy expandida dentro de las universidades y la justicia”, explica el historiador y politólogo Eduardo Vior.
Para el experto en Medio Oriente: “Erdogan sabe que se viene otro intento de golpe de Estado, por eso la radicalidad de la represión.” No obstante eso depende, sobre todo, de quién será el próximo presidente de Estados Unidos. “Si es Hillary Clinton seguro hay otro golpe. Si gana Donald Trump, con su concepción aislacionista, se abrirá otro tipo de relación con Turquía.” Vior subraya que la secta comandanda por Gülen “como otras de este tipo en el mundo están financiados por EEUU”.
El periodista y analista político Mariano Beldyk desde Ohio analizó la reunión del Partido Republicano que consagró a Donald Trump como candidato presidencial para las elecciones de noviembre. “Desde la derrota frente a Barack Obama, no ha surgido ningún líder en el Partido Republicano. Sólo tienen figuras en los extremos como los del Tea Party pero no hay líderes moderados”. Beldyk comentó que además hay un “sector de los republicanos que apuestan a la derrota de Trump porque si gana va a haber cambios profundos en el partido: muchos van a quedar desplazados y se van a cambiar las reglas del juego”, explicó. Una señal clara de esto es que los pesos pesados del partido como los Bush o John McCain faltaron a la convención.
Hoy en Colombia, en el marco de la fiesta del Día de la Independencia, desfilaron personas vestidas de negro y con banderas del mismo color por pedido del ex presidente Alvaro Uribe. Esta manifestación expresó su repudio a las negociaciones de paz entre las FARC y el gobierno de Juan Manuel Santos.
En Voces del Mundo se comentó además el plan del gobierno interino de Brasil de aplicar medidas de flexibilización laboral que cercenan los derechos de los trabajadores.
