“Si esperas a que sea el mejor momento, vas a esperar toda la vida”, dice Luis, quien se muestra satisfecho por cómo va su negocio.
En 2013 llegó a Rusia de vacaciones e inmediatamente se enamoró del país eslavo. Por esta razón, no se lo pensó dos veces cuando se le presentó la oportunidad de trasladarse a Moscú. En la capital rusa afirma sentirse mejor que en el Reino Unido y China, países donde vivió y trabajó antes.
Entre otras cosas, porque “Rusia tiene una gran tradición cultural y aquí el talento es muy apreciado”.
Luis Aguilar reconoce que le costó mucho sacrificio tener que ir a trabajar al extranjero, puesto que en México dejó a sus amigos y familiares, pero se muestra contento de encontrarse en Rusia, con la cual relaciona su futuro.