Hace 10 días el presidente estadounidense, Donald Trump, había sufrido otro revés diplomático cuando propuso que el Consejo de Seguridad extendiera por tiempo indeterminado el embargo de armas que pesa sobre Teherán hasta el 18 de octubre.
Trump rompió con ese pacto en mayo de 2018 de manera unilateral y restableció sus propias sanciones contra el país persa. Ahora quería arrastrar a los demás Estados a reforzar su política exterior involucrando a la ONU. Lo paradójico es que el país norteamericano basó sus planteos en los acuerdos fijados por el convenio. Y aunque dejó de respetarlo hace más de dos años, denuncia que Irán no lo está honrando.
"Lo que hacen los otros países no es otra cosa que aplicar el compromiso adquirido, y en segundo lugar no prestarse tan descaradamente a una actitud unilateral, soberbia de EEUU que siente que es el policía, juez y verdugo del mundo", según Hawda.
"Lo desecha y ahora quiere validar solamente una cláusula de ese acuerdo. Es un insulto a la inteligencia de todos los países", enfatizó.
El ajedrez y su tablero
Las últimas son "potencias que no tienen las mismas prácticas de EEUU a nivel mundial, entonces [a EEUU] no le queda otra alternativa que intentar usar la fuerza para doblegar a esos países y de pasada también a Irán", consideró.
"La gran diferencia es que China y Rusia, cuando quieren tener una riqueza, hacen buenos negocios. China no invade para colocar gobernantes títeres, no provoca golpes de Estado ni se mete en asuntos internos. Comercia según condiciones favorables para ambos interlocutores. El caso ruso es igual", indicó.
El analista destacó que "lo que está en juego realmente es no sólo aislar a Irán, sino también a China y Rusia". Mencionó una serie de acciones con las que "EEUU está provocando a Rusia" y apuntó a la instalación de misiles en Polonia, la colocación de "Gobiernos títeres en Estonia, Lituania, el golpe de Estado en Ucrania y lo que está pasando en el Donbás", como "claros intentos de cercar a Rusia".
Jaque al rey
"Desde el punto de vista de la hegemonía mundial, EEUU la está perdiendo", afirmó Hawda, para quien el problema de fondo que tiene la potencia son los proyectos globales y las formas de desarrollarlos por parte de Rusia y China.
La nueva Ruta de la Seda tiene entre otros componentes claves a Irán y su puerto de Chabahar, que permitirá que los tiempos de comercio con Europa se reduzcan al menos 15 días. En este contexto, Pekín y Teherán sellaron el 15 de agosto un megaacuerdo estratégico que marcará la política económica y comercial bilateral hasta 2045.
EE UU quedaría, según Hawda, "fuera del 70% del comercio mundial y del 65% de todas las fuentes de materias primas y riquezas del mundo. Ese 70% del comercio mundial le interesa a Europa, a los asiáticos y a los chinos. Los que están más alejados son los EEUU", consideró el experto.