Ramiro, hermano por parte de padre del mítico revolucionario argentino-cubano, nació en Cuba cuando Ernesto ya era un mito. Había sido asesinado en Bolivia en 1967, casi diez años antes de su nacimiento.
Sin embargo siempre estuvo presente en su vida. A veces incluso, demasiado.
"Por supuesto que era bastante complicado para un niño entender que por ejemplo en la escuela decíamos ´Pioneros por el comunismo seremos como el Che´ todas las mañanas. Por suerte mi padre siempre nos dijo que cada uno tenía que ser independiente, estudiar y ser uno mismo en la vida, que no podíamos estar amarrados a esa figura del hermano mayor".
Sus padres habían llegado a Cuba en 1974 huyendo de Argentina. Sobre esos cimientos construyó Ramiro su historia propia, que hoy lo ha llevado, entre otras cosas, a trabajar en temas vinculados a los derechos humanos.
"Mi padre murió cuando yo tenía 11 años, así que pude disfrutar la infancia. Y el Che no era el Che, era el hermano mayor que había hecho travesuras como cualquier niño, en la selva de Misiones, como que ya la familia no quería, ni queremos, darle esa impronta de héroe de bronce. No. Es un hermano, tan hermano como cualquier otro".
"El Che pone eso en los jóvenes, rebeldía, y está bueno que pase eso en la sociedad actual. Pensar qué nos pasa".
Con motivo del 90 aniversario, desde este 14 de junio se realizaron una serie de actividades en Rosario cuyos detalles pueden consultarse en la web del Centro de Estudios Latinoamericanos Ernesto Che Guevara.