"Todo eso era releído, traducido y relacionado con las problemáticas locales", explica González Posso, que actualmente preside el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz de Colombia, pero que en en 1968 era dirigente del movimiento estudiantil en la Universidad del Valle del Cauca.
"El movimiento en contra de la Alianza para el Progreso en la Universidad del Valle fue algo muy excepcional", recordó el entrevistado, en alusión al programa impulsado por Estados Unidos vigente entre 1961 y 1970.
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Si bien era definido como un plan de ayuda política, social y económica, las izquierdas latinoamericanas, los trabajadores y los estudiantes lo consideraban una parte sustancial de la política de contrainsurgencia que culminó con las dictaduras de los años 70.
En este sentido recordó que "en Suramérica la Universidad del Valle presentó la plataforma de entrenamiento a los Cuerpos de Paz" destinado a "todos estos jóvenes que llegaban desde universidades de Estados Unidos" enmarcados dentro de la estrategia de la Alianza para el progreso. Se trató de una iniciativa que buscaba contrarrestar culturalmente esa doctrina.
"Fue un movimiento sin precedentes,altamente calificado, por la información que dispuso y por los intelectuales y profesores de la misma universidad que participaron, además de las conexiones internacionales, especialmente con Chile", remarcó González Posso.
Finalmente indicó que la rebelión colombiana, que abarcó desde fines de los sesenta hasta comienzos de los setenta, se destacó por "la proliferación de expresiones culturales, explosión del teatro, de las artes, fue algo realmente propio del lenguaje de la época".