En la apertura del evento, que durará una semana, el secretario general del Partido y presidente del país, Xi Jinping, dijo: "Es hora de que tomemos el centro del escenario mundial y hagamos una mayor contribución a la humanidad". En lo que pareció una alusión directa a Donald Trump, expresó que "ningún país puede replegarse como si fuera una isla, vivimos en un mundo compartido y enfrentamos un destino compartido".
"Nos está diciendo que va a seguir luchando para que la posición de China sea cada vez más clara, más categórica, más importante en el mundo. No sin antes advertir que lo seguirán haciendo como hasta ahora, sin la brusquedad del elefante en la cacharrería, pero con el tacto y la tranquilidad que les da tener sus miles de años por detrás en su civilización, lo cual les permite pensar mucho más largamente en el tiempo y en la perspectiva, contrario a occidente, que es la inmediatez absoluta", destacó García.