Las autoridades brasileñas observan el nuevo estatus del país como una buena oportunidad para fortalecerse militarmente y aumentar su peso en la región y el resto del mundo, al tiempo que para Donald Trump es algo que responde al "interés nacional" de EEUU, que está muy metido últimamente en lo que está ocurriendo en su 'patio trasero'.
Para el analista geopolítico Javier Colomo Ugarte, doctor en Geografía e Historia, se trata de un error por parte de Brasil. Y es que está aumentando su "dependencia militar de quien puede ser el único agresor externo".
Afirmó que el excelente diálogo bilateral que hay actualmente entre Washington y Brasilia no constituye ninguna garantía para el gigante suramericano, al citar casos como el del dictador Manuel Noriega, cuyo servilismo ante EEUU no pudo prevenir su derrocamiento y encarcelamiento por el Estado norteamericano.
"EEUU no tiene amigos", enfatizó.
Javier Colomo Ugarte advirtió, asimismo, que Latinoamérica tampoco puede confiar en el armamento estadounidense. No descartó que hasta "deje de funcionar" en caso de que su empleo no sea de beneficio para su proveedor.
"Un Ejército que quiera tener una cierta garantía de que puede enfrentar a un agresor externo tiene que tener la garantía a su vez de que los instrumentos militares que le compra a uno vayan a funcionar bien e independientemente de cualquier interferencia que pueda existir de mantenimiento o de cualquier otra cosa", subrayó.
En este contexto, apuntó a Turquía, país que, siendo miembro de la OTAN, está adquiriendo armamento ruso.
Según el analista, el refrán que deberían tener en cuenta los países latinoamericanos que confían en EEUU es el siguiente: "Poco sacarás y mal parado saldrás".
La dirección en la que camina Brasil, que ejerce la presidencia pro tempore del grupo BRICS, integrado también por Rusia, China, la India y Sudáfrica, plantea dudas respecto al futuro del bloque, considerado una alternativa a las pretensiones estadounidense para el dominio global, dijo, por su parte, Franklin González, doctor en Ciencias Sociales.
"Por supuesto que EEUU no va a quedarse de brazos cruzados ante la pérdida de su hegemonía", indicó.
En este contexto, José Egido se mostró convencido de que EEUU es ahora un país demasiado débil como para que pueda revertir la dinámica internacional hacia el multilateralismo.
Al respecto, José Egido expresó su confianza en que EEUU es ahora un país demasiado débil como para que pueda revertir la dinámica internacional hacia el multilateralismo.
"EEUU está en franca pérdida de su hegemonía, no ha podido ni derribar al presidente Maduro en lo que va de año, ni tampoco impedir el desarrollo de México como un país independiente en sus fronteras", manifestó.
