Lo peor es lo mejor: principio fundamental de la actuación de Bruselas

Así lo hace pensar el hecho de que las políticas de Bruselas provocan una creciente debilidad de la Unión Europea, de lo cual el Brexit es su símbolo más reciente, así como un continuo empeoramiento de las relaciones del bloque comunitario con el resto del mundo.

En particular, se hizo todo para dañar seriamente la cooperación con Rusia. Están en peligro incluso las relaciones con EEUU, teniendo en cuenta una enorme cantidad de insultos dichos en relación a la persona que inesperadamente para muchos ganó las elecciones presidenciales en EEUU. Como si fuera poco, Bruselas está trabajando para convertir en su enemigo a Turquía, país que se muestra cansado de esperar la membresía de la Unión Europea.

El presidente de la nación otomana, Recep Tayyip Erdogan, ya no oculta su ira por el hecho de que no se lograron avances en esta materia desde que se firmara un acuerdo de asociación entre ambas partes en el año 1963. El mandatario se siente engañado por Bruselas que le prometía a Turquía numerosas ventajas a cambio de frenar los flujos migratorios provenientes de Oriente Medio.

Incluso la prensa occidental empieza a reconocer que las acciones de las actuales élites políticas europeas van en contra de los intereses del bloque comunitario. En este contexto, es llamativo un reciente artículo del diario El País de España, en el cual se constata que Bruselas sufrió un "deterioro en las relaciones" con sus "dos de los principales socios": Rusia y Turquía. Según el periódico, en el futuro también podría perderse la "conexión" con EEUU, a consecuencia de la actuación "en contra de todo uso diplomático" de los dirigentes europeos de cara a las elecciones en el país norteamericano.