Para muchos, el espíritu del Día para la Eliminación de las Armas Nucleares, instaurado por la ONU a través de la Resolución A/RES/68/32 de 5 de diciembre de 2013, es ofrecer una ocasión a las organizaciones internacionales y a los líderes mundiales para generar un mayor compromiso en el ámbito del desarme nuclear.
Gustavo Morales Delgado se pregunta:
“¿Qué pretenden? ¿Qué se deshaga el resto del mundo que ha empezado a entrar en el exclusivo club nuclear, como son los casos de India o Pakistán, o los países que están intentándolo ahora?”
El experto añade que “ni se sabe ni se deja de saber cómo es el caso de Corea del Norte”.
En este sentido, el secretario de Defensa de EEUU, Ashton Carter, comunicó su intención de invertir 108 mil millones de dólares en los próximos cinco años para mantener y mejorar la fuerza nuclear de su país. Entre tanto, la OTAN revisa su estrategia nuclear para disuadir posibles “terribles ataques” rusos.
Al respecto, Morales Delgado indica que en “estos momentos lo que más le preocupa a la OTAN es la actitud de Rusia que está poderosamente implicada en una guerra contra el terrorismo en Siria, en un desarrollo económico en Asia, y esas son ‘amenazas tremendas’, irónicamente hablando, para la Alianza Atlántica y para EEUU.
Lo que pretende la OTAN, opina el analista, “es mantener su superioridad militar en base a un armamento nuclear táctico sobre el campo de batalla y en base a un armamento nuclear estratégico que es el que EEUU se dispone a renovar para mantener activos sus silos de misiles nucleares”.
Entretanto, el vicecanciller ruso Serguéi Riabkov declaró que mientras en su doctrina militar, Moscú ya no pone énfasis en las armas nucleares, EEUU despliega ese tipo de armamento en Europa “al amparo de la tesis sobre el crecimiento de la amenaza nuclear rusa tergiversando intencionadamente la doctrina militar de Rusia en materia de uso de armas nucleares”.
Morales Delgado sostiene que “Rusia es el único país que ha hecho una reducción significativa de sus arsenales nucleares, mientras que la OTAN los ha ampliado y extendido en otras zonas de Europa. Y agrega que en todo caso, “la amenaza no proviene en este momento de Oriente, sino de una forma de entender el islam, el wahabismo integrista, que es practicado por aliados de EEUU, ejecutado por grupos cuyos líderes salieron de prisiones de EEUU, y llevado a cabo por organizaciones que fueron financiadas por la entonces secretaria de Estado de EEUU Hillary Clinton. Y esa es la verdadera amenaza”, concluye Gustavo Morales Delgado.