Es por ello que países miembros de la coalición internacional liderada por Washington se niegan a cooperar con Rusia en su campaña antiterrorista en Siria. Así, Londres rechazó la petición del Kremlin de proporcionar datos sobre las posiciones de los yihadistas en el país árabe.
Según José Vargas, "si los dirigentes europeos y mundiales hubieran tenido la determinación que tuvo Putin en combatir el Estado Islámico en Siria, quizá hoy se habría acabado con el grupo". En vez de criticar a Moscú, las potencias occidentales "deberían sumarse" a los esfuerzos de Rusia que tiene una gran "valentía de combatir al terrorismo en su propio terreno", concluyó José Vargas.