A partir del hobby de escuchar radios internacionales apareció 'ese bicho' de 'hacer radio', explica Ayala, quien presenta y produce desde hace casi tres décadas el programa Radioactividades en Radio Uruguay, la radio pública uruguaya.
El motivo más evidente de su periplo es su fanatismo por el fútbol, y además por ser "un admirador del proceso de la selecciones uruguayas (desde las categorías juveniles hasta la mayor) comandado por el maestro (Oscar) Tabárez (iniciado en el año 2006)".
Un proceso que es admirado allende las fronteras charrúas por atravesar, no sólo el aspecto deportivo, sino el social y cultural de los futbolistas celestes. Por eso, incide Ayala, "Ojalá que este proceso continúe más allá de la pelota y el fútbol, y que los uruguayos podamos entender que ese es el camino: estar juntos".
En este sentido, Ayala explica que en compañía de sus dos hijos ha seguido el proceso Tabárez. "Este es un viaje familiar muy esperado, durante once años estuvimos viendo a Uruguay en todas las eliminatorias (clasificatorias para los Mundiales de Sudáfrica, Brasil y Rusia) en tierra uruguaya. Lo seguimos en el Mundial de Brasil y el sueño era venir a Rusia y seguir a Uruguay hasta donde llegara".
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"El fútbol en Uruguay es una religión, es parte de nuestra identidad. A los hijos y sus padres les une mucho más, encuentras complicidad en lo cotidiano, pero también en esa cuestión de vivir la fiesta dentro del estadio, en ese abrazo en el himno, en un grito de gol, esas estampas son inolvidables para la vida con los seres que uno más quiere".
Por otra parte, Rusia impactó a Ayala. Señala que a pesar del idioma, que a veces es una barrera, ha descubierto una dimensión que no esperaba, al admitir que de Moscú no tenía mucha referencia.
"Estamos viviendo en un país (Uruguay) donde Rusia es lejana. (…) A través de la radio llegan cuestiones que tienen que ver sobre todo con la política internacional", pero no de la cotidianeidad "de la vida en Moscú, del moscovita y del ruso". "Por eso quedé gratamente sorprendido por la hospitalidad", observa el periodista, quien no solamente estuvo en la capital rusa, sino también en otras ciudades.
Y para muestra, un botón. Cuenta que al salir del estadio en Yekaterinburgo, con sus hijos quería ir a la Fan Fest. Se encontraron en una avenida a dos personas rusas que no les conocían, pero les llevaron al lugar y les convidaron con cerveza.
"La barrera del idioma y las diferentes culturas no impiden que nos vinculemos, y que los seres humanos podamos encontrarnos. Eso es maravilloso", dice emocionado.
Respecto a Moscú, remarca que "hay una ciudad debajo de la ciudad que es el metro. Quedé maravillado". Antes de partir de Uruguay rumbo a Rusia, Ayala leyó la historia del metro de Moscú. "Pero no alcanza con leer. Me enamoré del metro. Cada estación, cada escultura, cada pintura, cada rincón, transmite cosas. Entras en otra dimensión".
En este sentido, Ayala quedó sorprendido a tres niveles: "Quedé impactado en el metro, en la superficie, y desde el aire con Moscú".
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Entonces, Ayala vuelve sobre sus pasos y habla de otra de sus pasiones, la radio, y detalla algunos aspectos de su programa, al señalar que su motor "es la historia de la radio en Uruguay y el mundo". "Esto nació como un grupo de diexistas del DX Club del Uruguay que queríamos un espacio de radio para poder difundir lo que hacíamos en ese entonces (décadas de 1970 y 1980), que era escuchar radios de otros países. Una de las radios de otros países que escuchábamos, era Radio Moscú, después La Voz de Rusia, y ahora Radio Sputnik".
El periodista explica cómo germinó en su persona el amor por la radio. "En aquel entonces nos quedaron marcados en los '70 en particular, siendo muy jóvenes, los '15 minutos con el Uruguay' los sábados en la noche, donde escuchábamos las cosas que pasaban en Uruguay en plena dictadura. 'Escucha Chile'… voces emblemáticas de lo que era Radio Moscú, y eso quedó en nosotros".
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Entonces, Ayala explica la particular emoción que significa para sí, estar en los estudios de la antigua Radio Moscú, hoy, Radio Sputnik.
"Entrar a este edificio con esa historia, más allá de que ahora los tiempos son otros, y son nuevos, pero son etapas que recorrió esta casa radial, (…) es más simbólico, emblemático y emocionante".
En este viaje en familia junto a sus hijos, siguiendo a esta selección de Fútbol de Uruguay, Daniel Ayala siente que al conocer la amplia riqueza cultural de Rusia, la amabilidad de su gente, y vistar y compartir en Radio Sputnik, se cumplieron todos sus sueños.
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"Esta fue una experiencia maravillosa en lo personal, en lo familiar inolvidable. Es el viaje más maravilloso que hice en mi vida", concluye el médico y periodista.
