El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aseguró desde Bruselas que si se consiguen las ratificaciones no se necesitará ninguna prórroga respecto al 31 de octubre, la fecha límite de la salida de Reino Unido del bloque.
Johnson y Juncker se reunieron minutos antes del comienzo de la cumbre de líderes europeos, que finalmente aprobaron el tan esperado acuerdo.
"Al día de hoy no existe certeza de que el Gobierno tenga los votos suficientes para aprobar este nuevo acuerdo en el Parlamento", dijo Pose a En Órbita.
Los unionistas de Irlanda del Norte rechazan el arreglo. La falta de estos votos complicaría el plan de Johnson, a los que se pueden sumar algunos conservadores euroescépticos, según confió el entrevistado.
A estas agrupaciones se suman las principales fuerzas de oposición: los laboristas, los nacionalistas escoceses y los liberales demócratas, que ya anunciaron que votarán en contra.
"Johnson necesita al menos de 20 parlamentarios laboristas que voten a su favor para alcanzar las mayorías suficientes. Al día de hoy no parece ser el caso", explicó el analista.
El Premier no tiene mayoría en el Parlamento y necesita 320 de los 650 votos para conseguir que el acuerdo sea ratificado, ya que acuerdos similares alcanzados por la predecesora de Johnson, Theresa May (2016-2019), fueron rechazados en tres ocasiones
"En un principio el anuncio del trato fue una noticia positiva para los mercados. Pero al visualizarse el voto negativo de los norirlandeses, la libra comenzó a retroceder. Se espera volatilidad en los próximos días", apuntó Pose sobre la reacción de los mercados.
Según los términos acordados, se evita reinstaurar una frontera física entre las dos Irlandas.
"El acuerdo de Johnson propone una nueva salvaguardia que solo involucra a Irlanda del Norte, la que por un lado continúa siendo parte de la unión aduanera del Reino Unido, pero por otra parte no sale por completo del mercado común de la UE", indicó el experto.
Reforma tributaria en Colombia; Turquía suspende su operación en Siria
El Gobierno colombiano presentará una nueva ley de financiamiento, tras la sentencia de la Corte Constitucional que deja sin efecto la actual. La Justicia dio lugar a dos demandas que alegaban errores en el procedimiento para su aprobación en diciembre de 2018.
Estas fallas tienen que ver con que el proyecto no fue suficientemente divulgado y, por tanto, los legisladores no recibieron la información necesaria en tiempo y forma.
"La iniciativa es del Gobierno, pero al someterse a las Cámaras, los senadores pueden poner 'micos', normas que vulneren temas de equidad (…) pueden meter beneficios para sectores económicos para los que los congresistas hacen lobby", dijo a En Órbita José Roberto Acosta, economista y abogado colombiano, miembro de la Red por la Justicia Tributaria de ese país.
El ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, aseguró que la caída de la ley afectará el crecimiento y la credibilidad del país. El Ejecutivo tiene hasta el 31 de diciembre para presentar nuevamente el proyecto que será igual al ahora derogado, anunció el presidente Iván Duque.
En otro orden, Turquía suspendió su ofensiva contra las milicias kurdas en Siria.
Pence confirmó que se detendrá la operación para que los kurdos se retiren del noreste sirio y que podrían levantarse las sanciones de Washington contra Ankara.
Turquía y EEUU "colaborarán en la lucha contra el Estado Islámico y a favor de los derechos humanos y la protección de grupos religiosos y étnicos", agregó el vicepresidente.
En tanto, Donald Trump se expresó sobre el acuerdo desde Washington.
"Este es un gran día para la civilización. Me enorgullece que EEUU me haya acompañado en el camino necesario, aunque poco convencional. La gente ha estado tratando de lograr este 'acuerdo' durante muchos años. Se salvarán millones de vidas. ¡Felicitaciones a todos!", escribió en Twitter.
Erdogan advirtió en la víspera que solo pondría fin a la operación si los kurdos se desarman y se retiran de la "zona de seguridad" que Ankara pretende controlar en la frontera con Siria.
Turquía busca trasladar allí a los millones de refugiados sirios exiliados tras la guerra civil iniciada en 2011.
