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La también exdeportista confesó que siempre soñó con "representar a su país", aunque nunca pensó "que lo iba a hacer como oficial". Es de allí que se emocionó hasta las lágrimas durante la entrevista con nuestra emisora.
Pero quizás se le saltaran no solo por la alegría. Y es que visiblemente le duele la situación del deporte argentino. Afirmó que el sector sufre una "crisis cíclica, más allá de lo que uno piensa que cada Gobierno hace mejor o peor".
"Veníamos de un buen momento económico y ahora estamos hace un par de años en decadencia", sostuvo Inés Gómez, al agregar que áreas como cultura o deporte "es lo primero que se recorta cuando hay poca plata", una situación que está teniendo lugar en su país. Es por ello que los tres atletas argentinos que vinieron a Krasnoyarsk para defender a su patria "no están acompañados de sus entrenadores".
Como jefa de la delegación nacional, se considera responsable de paliar estas circunstancias y garantizar que "los atletas de la delegación estén lo mejor posible, que puedan disfrutar de cada momento, que no se preocupen por las cosas que no deberían preocuparse y que puedan ser atletas en la Universiada".
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Consultada sobre la organización y las infraestructuras que se prepararon para acoger los Juegos, aseveró que "no dudaba que esto iba a ser de absoluta excelencia".
"Sé que los rusos hacen las cosas casi a la perfección, por lo menos en lo que se ve, y es lo que quizás nosotros deberíamos aprender", concluyó.
