Las ideas que el británico John Maynard Keynes desarrolló en su Teoría general del empleo, el interés y el dinero (1936) volvieron a probarse a raíz de la crisis provocada por la pandemia. Al igual que en la recesión derivada de la Gran Depresión del 1929 —sobre la que trabajó el economista en su obra—, la crisis actual retrajo la demanda y deterioró los indicadores de producción, actividad y empleo.
"Llevamos apenas seis meses de la pandemia como tal y todavía es un poco temprano para decir cuál va a ser su real magnitud. Pero en términos de las políticas de efecto inmediato que se han aplicado, la mayoría son de un mayor gasto público y de endeudamiento, que si se pudieran comparar con algunas del pasado, son más parecidas a políticas de tipo keynesiano que de tipo liberal o de ajuste monetario", explicó a Sputnik el historiador económico Cristián Ducoing.
Según el investigador de la Escuela de Economía y Administración de la Universidad de Lund, en Suecia, esta política se aleja fuertemente de las medidas aplicadas tras la crisis de 2009 y un ejemplo claro lo ofrece la Unión Europea. El bloque, que otrora optara por políticas de ajuste monetario, esta vez optó por un paquete de ayudas sin precedentes, respaldado en endeudamiento.
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