En el reino animal hay diferencias entre los roles que ocupa cada sexo. En general, son los machos los más activos en el intercambio sexual, mientras las hembras son las sedentarias y selectivas. Aunque esto no es lo que ocurre en las cuevas subterráneas de la costa uruguaya.
En este país existen dos arañas lobo, pertenecientes a la subfamilia Allocosa brasiliensis, que se comportan de manera opuesta. Y debido a estas características, desde hace más de 30 años, aracnólogos del Instituto Clemente Estable la están estudiando a lo largo de las costas del Río Uruguay, Río de la Plata, y Océano Atlántico.
"Las hembras son las que salen a buscar pareja. Y a su vez los machos son selectivos al momento de decidir las hembras que los visitan. Tienen preferencia por hembras vírgenes, incluso las que son rechazadas se las pueden canibalizar. Algo muy llamativo en el reino animal", explicó a Sputnik, Anita Aisenberg, responsable de la investigación y del Departamento de Ecología y Biología Evolutiva del Clemente Estable.
Desde marzo, las particularidades de estos tipo de arañas lobo están siendo analizadas a través de un proyecto de investigación que reúne a un equipo internacional financiado por National Geographic y la Agencia Nacional de Investigación e Innovación de Uruguay.
El grupo multidisciplinario está integrado por investigadores y estudiantes de Brasil, Argentina, Chile y Cataluña, especializados en comportamiento animal, taxonomía, ecología, entre otras áreas.
Hasta el momento las dos especies han sido detectadas solo en Uruguay, pero el objetivo de la investigación es ver si también están presentes en otros lugares de Sudamérica. Una de las hipótesis es que la inversión se debió a lo inhóspito que puede ser el paisaje costero uruguayo.
Según Aisenberg, el clima adverso lleva a que los machos tengan que construir cuevas de gran extensión, entre 10 y 15 centímetros, tapizadas en seda. El costo energético lo lleva a quedarse en ese lugar, mientras la hembra sale a buscar comida.
"Puede tener que ver con un reparto más equitativo de lo que es el costo de la reproducción en esta especie. Si la hembra tuviera que salir a alimentarse, hacer la cueva larga, sería demasiado para un solo sexo", reflexionó la investigadora.
Te puede interesar: El veneno de araña ayudará a proteger las células del cerebro humano