El aparato de láser reemplazaría las inyecciones intramusculares, y tiene como ventaja evitar el contacto físico entre el dispositivo y el paciente. Además, disminuirá el riesgo de contaminación y dolor, ya que el tamaño del chorro reduce el riesgo de afectar nervios.
En Big Bang hablamos con el doctor Rubén Ramos García, investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica de México, líder del equipo que está desarrollando el prototipo.
En Big Bang hablamos con el doctor Rubén Ramos García, investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica de México, líder del equipo que está desarrollando el prototipo.
"Me di cuenta que el temor a la agujas es enorme. No solo es el miedo, sino el costo que representa manejarlas adecuadamente y el riesgo que representa en la salud no solo de trabajadores de hospitales, como médicos y enfermeras, sino también de las personas que manejan desechos. Si pudiéramos hacer un sistema que se deshiciera de todas estas cosas sería maravilloso".