Según esta fuente, el novedoso sistema será capaz de controlar en tiempo real los sistemas de misiles antitanque, así como detectar blancos y determinar su velocidad y su trayectoria.
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También podrá analizar sus coordenadas y entregarlas a los sistemas de misiles para atacar con eficacia objetivos enemigos. De acuerdo con los expertos militares, esta novedad se convertirá en un obstáculo insuperable para los vehículos blindados del adversario.
Los sistemas de misiles de largo alcance Jrizantema estarán en la primera línea de este 'muro antitanque' ruso. Estos complejos únicos no solo están dotados de herramientas ópticas, sino que también disponen de sistemas radar, por lo cual son capaces de alcanzar blancos a una distancia de hasta 6 kilómetros en cualquier momento del día y en cualquier condición meteorológica.
Después, los vehículos del enemigo tendrán que hacer frente a los sistemas Kornet y Shturm-S, que tienen un alcance de hasta 5 kilómetros. Por último, los vehículos del enemigo serán atacados por sistemas Metis, que tienen un alcance de hasta dos kilómetros.
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Según declaró a Izvestia el historiador militar Alexéi Jlópotov, "los vehículos blindados siguen desempeñando un papel importante, ya que son capaces de realizar maniobras decisivas y penetrar la defensa [enemiga]".
Así, "al igual que en la época de la Segunda Guerra Mundial, la lucha contra los vehículos blindados sigue siendo una prioridad para el desarrollo de los sistemas de defensa".
El experto subrayó que esta es la primera vez que Rusia integra medios de defensa antitanque en un sistema común.
