Últimamente tienen doble finalidad ya que encontraron aplicación en el sector civil y siguen introduciéndose en la vida cotidiana cada vez más, explica Dmitri Panov, director general de la empresa rusa Technomash, que se dedica a la actividad cósmica.
El experto en su artículo para Rossiyaskaya Gazeta pone numerosos ejemplos.
Gracias a los sistemas satelitales, sigue, tenemos el monitoreo satelital de transporte, la radionavegación, la geolocalización y otras tecnologías que ya forman parte de nuestra vida cotidiana. Además, las tecnologías espaciales influyeron mucho en la medicina al haber permitido la fabricación de la tomografía por resonancia magnética, micro-endoscopios y nuevos métodos de detectar células de cáncer. Y eso sin hablar de varios "sensores que permiten controlar la calidad de alimentos y tecnologías para purificar el agua, entre otros, que mejoraron la calidad de la vida humana en todo el planeta".
En primer lugar, constata Panov, ello se debe a que aparecen nuevos jugadores tanto por la presencia de nuevos países en ese mercado como por el desarrollo de la cosmonáutica privada.
"El espacio va convirtiéndose en más accesible, este hecho estimula la rivalidad en el mercado y hace aparecer nuevas tecnologías revolucionarias que en un futuro próximo cambiarán la industria espacial", escribe.
El autor destaca ante todo las tecnologías informáticas que refuerzan sus posiciones en la industria espacial. Se trata de la modulación matemática, la programación, la robotización, la microelectrónica, las tecnologías aditivas, de elaboración y análisis de datos.
"Las nuevas tecnologías se están mezclando, se refuerzan una a otra y todos juntas empiezan a cambiar el aspecto de la industria. (…) Estos cambios cambiarán no solo el sector espacial sino toda nuestra vida", concluye el autor.
