"Hay que implantar un sistema preventivo de revisión de las mercancías que se venderán en las tiendas para niños para comprobar que son seguras para la salud física y mental de los niños", Cita el diario Izvestia la carta que Lantratóva dirigió a Rospotrebnadzor.
Entre los juguetes peligrosos Lantrátova menciona la aparición de juguetes de promulgan abiertamente los ideales nazis, así como las muñecas monstruos, zombis y hasta muñecas que parecen cadáveres.
La idea ha sido inmediatamente apoyada por los parlamentarios rusos, según destaca Izvestia, aunque los mismos precisaron que no se trata de prohibir por prohibir, sino de alertar a los padres con un letrero en la caja que ese artículo puede afectar la salud mental de su crío.
"Es necesario tener algo que marque esos juguetes, y luego que sean los propios ciudadanos quienes decidan si deben tener o no tener ese juguete", declaró al diario Olga Alímova, miembro del comité de la Duma que se dedica a las familias, las mujeres y los niños.