Varios bancos moscovitas confirmaron al periódico que están trabajando en el asunto ya que actualmente los carteles electrónicos callejeros más difundidos en las oficinas de cambio capitalinas admiten solo cuatro dígitos y por lo tanto serán incapaces de mostrar una cotización igual o superior a 100 rublos.
Otra opción, escribe el diario, consiste en mover el separador decimal pero en este caso los bancos tendrán que redondear el cambio hasta las décimas del rublo –o decenas de copecas– mientras que la propia reprogramación del cartel supondrá gastos y problemas logísticos.
La cotización establecida por el Banco Central ruso para este martes, 16 de diciembre, sitúa el dólar en 58,35 rublos y el euro, en 72,66 rublos. El 1 de enero de 2014, el cambio fue de 32,66 rublos por dólar y de 45,06 por euro, es decir en lo que va del año las dos divisas se han encarecido un 50% y un 40% frente a la moneda rusa.
Los principales bancos han rehusado dar a Izvestia pronósticos sobre el cambio del rublo siquiera sea para el futuro más próximo.