Los rusos gastan cada vez más en los pagos de sus créditos pero la morosidad aumenta todavía más rápido, según un informe del Banco Central citado hoy en Rossiyskaya Gazeta.
Los préstamos sin garantía ya triplican en volumen a los hipotecarios. Representan, respectivamente, el 63% y el 21% en la estructura total de los créditos.
Paralelamente aumenta la ratio de endeudamiento: en el segundo trimestre de este año, los rusos gastaron un 25% de sus ingresos en los pagos de créditos, y en el tercero, casi un tercio.
Otra tendencia negativa es la morosidad cuyo aumento en el período de julio a septiembre se adelantó por primera vez al de la cartera crediticia, el 33% frente al 31%.
El creciente endeudamiento de los particulares junto al continuo deterioro de la calidad de la cartera crediticia implica riesgos extra para los bancos, especialmente aquellos que mantienen una agresiva oferta de préstamos de consumo con altas tasas de interés.