Moscú, RIA Novosti
VREMIA NOVOSTEI
LOS MANDATARIOS DE IRÁN Y TURKMENISTÁN INTENTAN ENTABLAR AMISTAD
Hoy, el presidente de Irán comienza su visita a Turkmenistán, de dos días de duración, luego de lo cual se dirigirá a Tayikistán. Es el primer viaje de Mahmud Ahmadineyad a Turkmenistán después de que hace un año triunfara en las elecciones presidenciales. Tomando en consideración los tradicionales vínculos estrechos entre los dos países limítrofes, una pausa tan larga evidencia palmariamente la falta de confianza entre Irán y Turkmenistán. El tema central de las negociaciones turkmeno-iraníes es la cooperación en el sector de gas. Pese a que en 2005 Irán limitó las compras del gas turkmeno hasta 5.300 millones de metros cúbicos, las autoridades de Turkmenistán se empeñan en aumentar los suministros de este hidrocarburo a los países vecinos hasta 13.000 millones de metros cúbicos. Además, el primer mandatario de Turkmenistán, Saparmurat Niyazov, plantea aumentar de $44 hasta $80-85 el precio por mil metros cúbicos de gas, deseando mostrarles a las autoridades de Teherán su benevolencia especial, pues para Rusia y Ucrania, después de expirado el plazo de vigencia de los contratos actuales, el precio sería de $100.
Los dos líderes planean discutir asimismo el problema de división del Mar Caspio que espera su solución ya desde hace más de diez años. Las autoridades de Asjabad, capital de Turkmenistán que debería haber albergado una reunión de turno de representantes de los cinco Estados del Caspio (Azerbaiyán, Irán, Kazajstán, Rusia y Turkmenistán) que conforman el llamado Grupo de Trabajo para el Caspio, eludieron organizarla. No se descarta que en el marco de la discusión de "los temas de palpitante actualidad", según comunican medios oficiosos turkmenos, el presidente iraní procure asegurarse el apoyo por Saparmurat Niyazov de la actitud de Teherán respecto al conflicto en Oriente Próximo. Como suele suceder en tales casos, el guía turkmeno esquivaría prestar apoyo y lo haría en público, alegando a la neutralidad de su país.
VEDOMOSTI
MEDVEDEV VERSUS SURKOV
El vocablo democracia no tolera calificativos algunos, sostiene el primer presidente adjunto del Gobierno ruso, Dmitri Medvedev.
Se da la impresión de que la entrevista con Medvedev, publicada ayer en la revista "Expert", dio pie a la verdadera confrontación ideológica en el escenario político nacional. Se trata precisamente del enfrentamiento entre el valedor de la "democracia soberana", Vladislav Surkov, jefe adjunto del Gabinete de la Presidencia, y el partidario de la democracia sin adjetivos, Dmitri Medvedev.
Ambos se desvelan como figuras notables en la vida política, disponen de una amplia gama de instrumentos administrativos, pero Medvedev es delfín de Putin, o sea, un hombre orientado al futuro, mientras Surkov, último de la cohorte de Yeltsin, según parece, tiene pocas posibilidades de salir adelante.
Dmitri Medvedev se puso a polemizar con Vladislav Surkov, platicando con Valeri Fadeev, director de la revista "Expert" y uno de los autores del documento programático intitulado "Modelo económico de la democracia soberana" que insertó en su sitio en Internet el partido pro presidencial "Rusia Unida". A primera vista, Medvedev se impone sobre su rival: "La democracia es un concepto absolutamente fundamental. Y se puede contraponerla sólo a los regímenes dictatoriales y totalitarios." Acto seguido, el primer presidente adjunto del Gobierno somete a críticas el término "democracia soberana", cuyo modelo el documento mencionado llama a introducir en Rusia. Medvedev lo interpreta como aspiración a aumentar el intervensionismo del Estado en la economía.
No obstante, el análisis detallado de los dos programas (publicado en el sitio de "Rusia Unida" y expuesto por Medvedev en entrevista a la revista "Expert") da motivos para afirmar que existen pocas diferencias en las posiciones de los polemistas. La única estriba en la terminología que utilizan.
KOMMERSANT
CHÁVEZ APUNTA A LUKASHENKO EN SU EQUIPO
El presidente venezolano Hugo Chávez, quien está realizando estos días una gira intercontinental, completó el lunes su visita a Bielorrusia. Dos mandatarios denostados por Occidente se entendieron enseguida y prometieron formar ‘un equipo de batalla'.
Chávez hizo un buen obsequio a Lukashenko diciendo que Venezuela opta por el modelo del desarrollo aplicado en Bielorrusia.
‘Debemos hacer realidad la consigna de Lenin sobre le carácter inaceptable de la explotación del hombre por el hombre' - declaró él, añadiendo que Bielorrusia es un modelo de Estado social como el que se construye en Venezuela.
Chávez, a quien definen con frecuencia como ‘dictador de nuevo tipo', mencionó también otra asignatura de común interés con Lukashenko, llamado ‘último dictador europeo' en Occidente: ‘Nosotros debemos defender los intereses del hombre, y no los intereses endemoniados de los capitalistas en cualquier parte que estén, en América del Norte o en Europa'.
Las negociaciones en Minsk se centraron en los temas de cooperación económica, comercial y técnica militar entre Bielorrusia y Venezuela, así como en la actuación coordinada en el marco de la ONU y el Movimiento de los No Alineados. Las partes firmaron siete convenios de colaboración en materia energética, petroquímica, producción de camiones pesados, ciencia y tecnología y educación. El hecho de que el comercio entre Caracas y Minsk arrojó el pasado año un volumen de menos de US$16 millones, no incomodaba a nadie. Hugo Chávez calificó de ‘simbólico' el que su encuentro con Lukashenko tuviera lugar el 24 de julio - fecha del aniversario bolivariano y de la proclamación de la República de Venezuela. ‘He encontrado aquí a un nuevo amigo' - confesó Chávez, agregando que va a crear con Lukashenko un equipo. Y será un equipo de batalla, precisó él.
El hermano del presidente venezolano, Adan Chávez, había anticipado a finales de junio pasado, durante una visita a Minsk, contra quién jugaría ese ‘equipo de batalla' formado por Bielorrusia y Venezuela.
Los dos países tienen un ‘enemigo común' que se empeña en ponerles trabas, y Venezuela quiere aunar los esfuerzos de la comunidad internacional contra el dictado de EE.UU., dijo en aquella ocasión el hermano mayor del mandatario venezolano.
Anoche, Hugo Chávez se desplazó de Minsk a la ciudad rusa de Volgogrado, y el próximo miércoles tiene previsto reunirse con Vladímir Putin en Moscú.
ROSSIYSKAYA GACETA
YUSCHENKO OPTÓ POR PROLONGAR LA PARÁLISIS DEL PODER
Formalmente, hoy expira el plazo previsto en la Constitución de Ucrania para la formación del nuevo Gabinete sin que el Parlamento - también, en plano formal - haya logrado hacerlo en los primeros 60 días de su legislatura.
Los diputados no son los únicos culpables de esa dilación: el pasado 17 de julio, presentaron la candidatura de Víctor Yanukovich, líder del Partido de las Regiones, para la jefatura del Gobierno pero el mandatario ucraniano Víctor Yuschenko pidió algún tiempo para la reflexión.
El jefe de Estado, en opinión de los analistas locales, ha vuelto a demostrar una vez más que no sabe hacer nada a tiempo. Yuschenko dijo que usaría la totalidad del plazo reservado en la Carta Magna de Ucrania - 15 días, hasta el próximo 1 de agosto - para pensar sobre la candidatura del primer ministro. El presidente se muestra convencido de que tiene pleno derecho de rechazar al candidato propuesto por la mayoría parlamentaria. En este caso - formalmente, otra vez - Yuschenko obtendría 15 días extra para reflexionar sobre una candidatura alternativa, también presentada por los legisladores.
El ministro del Interior de Ucrania, Yuri Lutsenko, decidió echarle una mano al jefe de Estado dando a entender que su prolongada reflexión sobre la candidatura propuesta es atribuible a las ‘manchas oscuras' en la biografía de Yanukovich. En 2005, la Fiscalía de Donetsk había decretado la apertura de un expediente por supuesto delito de falsificación cometido durante la anulación de antecedentes penales de Yanukovich pero en 2006 el caso fue archivado por falta de pruebas.
El hecho de que los diputados no han podido formar el Gobierno para el 25 de julio, le ofrece a Yuschenko la oportunidad de disolver el Parlamento, cosa que exige Yulia Timoshenko.
La fracción parlamentaria de Timoshenko ya no existe: cuatro miembros se pasaron a las filas de la Coalición Anticrisis, y los restantes 125 están dispuestos a dejar sus mandatos por exigencia de Timoshenko. Ella confía en que los militantes del partido oficialista Nuestra Ucrania sigan este ejemplo. En este caso, se quedarían en la asamblea legislativa menos de 300 personas, lo cual derivaría en una disolución automática sin necesidad de que el presidente firme el respectivo decreto.
Timoshenko ha calculado ya que en las nuevas elecciones legislativas se van a imponer dos fuerzas: su propia alianza, BYT, y el Partido de las Regiones. En tal caso, ella espera formar mayoría parlamentaria y promover la convocatoria anticipada de comicios presidenciales.
