Ereván plantea como impostergable el asunto de canje de prisioneros con Bakú

EREVÁN (Sputnik) — El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, al intervenir en la sesión telemática del Consejo de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) definió como impostergable la solución del problema de los prisioneros y los desaparecidos durante la escalada en Nagorno Karabaj.

"Las hostilidades cesaron hace más de tres semanas, en la zona del conflicto se encuentra un contingente de paz ruso, pero seguimos afrontando problemas impostergables. Primero, es el asunto del canje de prisioneros, rehenes, otros retenidos, de los cuerpos de los caídos y de la aclaración de la suerte de los desaparecidos", dijo y agregó que la parte armenia está preparada para intensificar sus esfuerzos para lograrlo.

Pashinián señaló que se debe excluir el uso de la violencia contra los prisioneros y los detenidos y la humillación de la dignidad de ellos, crear condiciones para que los karabajíes puedan regresar a sus hogares, así como restablecer una vida normal en Nagorno Karabaj.

Además instó a tomar medidas para garantizar la protección de los monumentos culturales y religiosos del pueblo armenio que se encuentran en los territorios que pasan bajo control de las tropas azeríes.

"Y por último, se debe garantizar el funcionamiento seguro del transporte, excluir cualesquiera provocaciones y crear condiciones normales para el funcionamiento de la infraestructura de importancia vital para el pueblo de Artsaj [autodenominación de Nagorno Karabaj]", declaró el primer ministro.

También señaló que el contingente de paz ruso estacionado a lo largo de la línea de separación de las partes en conflicto y a lo largo del corredor de Lachín, que conecta a Nagorno Karabaj con Armenia, "actúa hoy día como un garante de la salvaguardia de la paz y de la seguridad en la región".

Pashinián destacó "el papel de suma importancia" que jugó en la eliminación de la escalada el presidente de Rusia, Vladímir Putin, agregando que él en persona mantenía contacto permanente con Putin a lo largo de los 44 días que duraron las hostilidades, debatiendo las medidas a tomar para detener el derramamiento de sangre y salvar vidas.

Las hostilidades en Nagorno Karabaj, que volvieron a estallar a fines de septiembre pasado y provocaron miles de muertos, cesaron el 10 de noviembre gracias a una declaración acordada por los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Rusia.

Por acuerdo entre las partes, Rusia envió sus fuerzas de paz a Nagorno Karabaj. Los bandos del conflicto deberán permanecer en sus posiciones actuales y efectuar el canje de los prisioneros de guerra, otros detenidos y los cuerpos de los caídos.