"Otra vez, llamamos a una investigación internacional urgente del envenenamiento de Alexéi Navalni en plena transparencia y cooperación con la OPAQ", dijo Borrell al finalizar una reunión del Consejo de ministros de Exteriores europeos en Bruselas.
El jefe de la diplomacia europea añadió que el Consejo debatirá en detalle el tema de Rusia el próximo mes.
En el hospital de Omsk, Navalni fue inducido en un coma y tratado con atropina, fármaco que suele utilizarse como antídoto para los agentes nerviosos. Sin embargo, los médicos del hospital ruso afirmaron luego que no habían detectado rastros de toxinas en la sangre y la orina del paciente, cuya condición atribuyeron a un "trastorno metabólico".
El 2 de septiembre, el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert, informó que los análisis toxicológicos realizados por un laboratorio de las Fuerzas Armadas germanas muestran que Navalni fue envenenado con una sustancia del grupo Novichok, incluido en la lista de sustancias prohibidas de la Convención sobre Armas Químicas.
Desde Moscú califican de infundada la versión alemana sobre lo ocurrido con Navalni y dicen esperar las respuestas oficiales a las solicitudes enviadas a Berlín.
Hace una semana, la clínica alemana Charité informó que el opositor ruso fue desconectado de la ventilación mecánica y ya es capaz de levantarse de la cama, y un día después, el propio Navalni publicó su primera foto desde la salida de coma y confirmó que ya puede respirar por su cuenta.