"Por respeto, por respeto a la vida del señor Assange, nosotros obtuvimos el compromiso por parte del Gobierno de Reino Unido de que no se le iba a extraditar a un país en el que corriese peligro su vida. Y nosotros esperamos y estamos seguros de que Reino Unido va a cumplir con este precepto, por lo menos garantizando la vida del señor Assange", dijo Moreno en un conversatorio con el Programa América Latina, del foro político estadounidense Wilson Center.
Moreno, sin embargo, criticó al ciberactivista australiano, de quien dijo "ha hecho daño a la política europea, a la política estadounidense y a la política ecuatoriana".
"A lo mejor tontamente no lo sabía, (pero) estaba manchando con sus heces territorio ecuatoriano, porque eso es una embajada", dijo Moreno.
"Francamente eso ya no lo toleré (…) fuimos al extremo de la tolerancia (…) y pedí que lo saquen de ahí", agregó el mandatario.
El fundador de WikiLeaks fue arrestado por la Policía británica en 2019, luego de que Moreno le retirara el asilo diplomático concedido en 2012 por el entonces presidente Rafael Correa (2007-2017).
Al momento, Assange enfrenta un juicio de extradición a Estados Unidos, con cargos de conspiración para conseguir acceso a computadores del gobierno y publicar, a través de WikiLeaks, miles de documentos filtrados con información sobre la actuación del ejército estadounidense en los conflictos armados en Afganistán e Irak, entre otros cables confidenciales.
La audiencia para decidir si Assange debe ser enviado a Estados Unidos se reanudó el 7 de septiembre en el Tribunal Penal Central de Londres, después de seis meses de retraso debido a la pandemia de COVID-19.
El fundador de WikiLeaks se encuentra encerrado en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh desde su arresto en la embajada de Ecuador en Londres, en abril de 2019.
Se espera que la audiencia dure al menos tres semanas, y es muy probable que el lado perdedor apele el veredicto.