El presidente bielorruso Alexandr Lukashenko denunció con anterioridad el "desplazamiento de las tropas de la OTAN a los territorios de Polonia y Lituania", y un "gran empeño por desestabilizar la situación" en el oeste de Bielorrusia.
"Nuestro despliegue en la región del Báltico en el territorio de los aliados de la OTAN tiene carácter defensivo y precedía a la crisis en Bielorrusia", afirmó Lungescu.
Añadió que la OTAN muestra transparencia cuando se trata de ejercicios y entrenamientos, que se planean de antemano.
Bielorrusia es escenario de protestas desde el 9 de agosto por los resultados de las elecciones presidenciales que revalidaron un nuevo periodo del actual mandatario Lukashenko.
Según el escrutinio oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1% de los votos, seguido de la opositora Svetlana Tijanóvskaya con el 10,12% de los apoyos. Los otros tres candidatos opositores reunieron juntos poco más del 4%.
La oposición bielorrusa exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko ha descartado en términos contundentes.