El diplomático expresó que las violaciones del derecho internacional, de las cuales el bloque comunitario vuelve a acusar a Rusia, son exactamente lo que Moscú evidencia por parte de las autoridades de Kiev.
"A este respecto, en vez de retransmitir acusaciones infundadas de Ucrania contra Rusia, proponemos a la UE prestar la debida atención a las acciones inhumanas de Kiev que consisten en cortar el suministro de agua y electricidad a Crimea", dijo Záitsev ante la prensa.
También abordó las palabras de la Comisión Europea (CE) que el pasado 28 de julio calificó la construcción de buques de asalto anfibio en la ciudad de Kerch como un testimonio de la "militarización" de Crimea por parte de Rusia, lo que es capaz afectar la seguridad en la región del mar Negro.
"Lo vemos como un nuevo intento de injerir en asuntos internos de otro Estado", recalcó el diplomático.
Subrayó que Rusia, al reforzar su Armada, busca garantizar la estabilidad y la seguridad en Crimea.
Además, recordó que los países del bloque comunitario rechazan expedir visados Schengen a los residentes de Crimea con pasaportes obtenidos después de 2014.
"Proponemos a la UE que abandone (...) la discriminación de visados para los habitantes de Crimea que contradice directamente las normas del derecho internacional y los documentos fundamentales de la propia UE", recalcó el diplomático.
Crimea se escindió de Ucrania y se reincorporó a Rusia tras celebrar en marzo de 2014 un referéndum en el que la mayoría aplastante de los votantes —más del 96%— avaló esa opción.
Las autoridades ucranianas consideran a Crimea un territorio "provisionalmente ocupado".
Moscú ha declarado en repetidas ocasiones que los habitantes de Crimea, de manera democrática y en plena conformidad con el derecho internacional y la Carta de la ONU, votaron a favor de la reunificación con Rusia.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó que el tema de Crimea "está zanjado definitivamente".