"Tenemos un acuerdo de principio sobre el suministro del segundo lote del S-400. Faltan trabajos técnicos sobre la transferencia de tecnologías, detalles de producción conjunta y una hoja de ruta", dijo Demir en una entrevista con la cadena NTV.
Según el funcionario, Turquía se propone hacer operativo el sistema S-400 pese a los retrasos generados por la pandemia de coronavirus.
"El sistema S-400 se compra para su uso. Lo han dicho en repetidas ocasiones en todos los niveles estatales. El trabajo continúa", afirmó.
También añadió que Ankara está interesada en los sistemas de defensa aérea Patriot y Eurosam.
En septiembre pasado Rusia completó el primer contrato con Ankara. Las baterías S-400 protegen el espacio aéreo turco desde abril.
El S-400 (SA-21 Growler en la clasificación de la OTAN) es capaz de abatir aparatos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero, misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
Con un alcance de hasta 400 kilómetros, el sistema puede abatir blancos a alturas de hasta 30 kilómetros.