"Moscú sigue convencida de que la única solución posible en Libia es por la vía de comunicación política y diplomática entre todas las partes del conflicto, en primer lugar", dijo Peskov acerca de las declaraciones del comandante del Ejército Nacional Libio (ENL), el mariscal Jalifa Haftar.
El portavoz del Kremlin añadió que Rusia mantiene el contacto con todas las partes de la crisis en Libia.
El pasado 23 de abril, Haftar llamó al pueblo libio a rechazar el Acuerdo Político Libio negociado bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y firmado en diciembre de 2015 en Sjirat (Marruecos), lo que resultó en la creación del Gobierno de Acuerdo Nacional con sede en Trípoli.
Libia continúa sumida en una crisis desde que la caída del que fuera su líder durante décadas, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales.
Actualmente en el país hay una dualidad de poderes: el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del Ejército Nacional Libio, y el Gobierno de Acuerdo Nacional avalado por la ONU, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.
Una conferencia internacional sobre Libia que tuvo lugar en la capital alemana en enero pasado instó a redoblar los esfuerzos para lograr un armisticio sostenible en Libia, pero los bandos en conflicto, apoyados cada cual por actores externos, siguen violando la tregua declarada el 12 de enero por iniciativa de Rusia y Turquía.