"Reconozco que el precio [de los combustibles] está alto en las gasolineras", dijo en declaraciones a la prensa recogidas por el portal de noticias G1, y admitió que el incremento es debido a los efectos del asesinato en Irak de Soleimani, quien "no es general", sostuvo.
No obstante, señaló que "el impacto no fue grande, fue de 5%".
"No sé cómo está hoy en comparación al día del ataque, pero la tendencia es que se estabilice", añadió.
El 3 de enero, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil divulgó un comunicado en el que mostraba apoyo a EEUU en la "lucha contra el flagelo del terrorismo".
"Nosotros no aceptamos el terrorismo, no interesa el lugar del mundo en el que ocurra", afirmó.
Asimismo, advirtió que Brasil entregará a su país de origen a cualquier terrorista extranjero que esté en territorio nacional, y mencionó entre ellos al italiano Cesare Battisti, condenado a prisión perpetua por cuatro asesinatos en Italia en la década de 1970.
Bolsonaro también incluyó entre los "terroristas" a los médicos cubanos del programa social "Más Médicos".
El mandatario también aseguró que se reunirá este 6 de enero con miembros del Gobierno para discutir fórmulas para evitar impactos en los precios de la gasolina y el diésel, aunque reiteró que no pretende interferir en la política de precios de la semiestatal Petrobras.