"Tendremos una agenda importante con América Latina; por supuesto, es un honor muy grande para nuestra región tener finalmente un director general [del OIEA], así que trabajaremos muy intensamente con todos los países de mi región", dijo Grossi, que asumió el cargo este 3 de diciembre, convirtiéndose en el primer latinoamericano en dirigir la agencia nuclear de las Naciones Unidas.
Actualmente en América Latina hay siete reactores nucleares operativos: tres en Argentina, dos en Brasil y dos en México. Dos reactores están siendo construidos: uno en Argentina y el otro en Brasil.
Cierre de centrales nucleares en Europa
El OIEA está dispuesto a brindar asistencia a los países europeos que decidieron cerrar sus centrales nucleares, aseguró Grossi.
"Por supuesto, son países importantes, tenemos el caso de Alemania, por ejemplo, y es una decisión nacional, soberana que respetamos, e inclusive trabajaremos intensamente con esos países para asistirlos, si así lo requieren, en todas las tareas de desmontaje y desmantelamiento de estas plantas", dijo.
Por lo tanto, destacó, "la tendencia que se ve no es una tendencia negativa sino una tendencia relativamente positiva".
Agregó que, además de Europa, el OIEA tiene "mucho trabajo que hacer" en otros países y regiones, como Rusia, Asia, "donde es evidente que hay un crecimiento exponencial de las centrales nucleares", y Latinoamérica.
"De modo tal que tenemos una agenda muy nutrida por delante", resumió.
Entre los países europeos que optaron por el abandono de la energía nuclear destacan:
- Alemania,
- Austria,
- Bélgica,
- Italia, Suecia,
- Suiza.
Primer contacto con Irán
El nuevo director general del OIEA destacó que tendrá esta semana un primer contacto con las autoridades de Irán para coordinar la próxima reunión, que podría celebrarse en Viena, ciudad que alberga la sede del organismo.
"Vamos a tener ya esta semana un primer contacto con las autoridades iraníes, y a partir de ese primer contacto que voy a tener con ellos vamos a ir planificando una próxima visita o una próxima reunión que puede ser aquí en Viena también, no necesariamente implica viajar. Eso lo iremos viendo, pero ya tendré un primer contacto con ellos esta primera semana, lo cual es muy auspicioso", indicó.
Grossi, quien asumió el cargo este 3 de diciembre, destacó que el OIEA tiene "un mandato que cumplir, que está muy claro, lo conoce Irán, lo conoce la comunidad internacional".
Al ser preguntado sobre si el OIEA ya sostuvo un encuentro con las autoridades iraníes sobre las partículas de uranio detectadas en un lugar no declarado en Irán, Grossi respondió que "no ha habido una reunión en específico" pero subrayó que "lo que hay es un contacto prácticamente constante con Irán".
"Hay un intercambio constante con ellos, pero todavía no hemos llegado a un punto satisfactorio, así que continuamos en la conversación", explicó el director general del organismo.
El pasado 7 de noviembre, el entonces director general en funciones del OIEA, Cornel Feruta, informó a su Junta de Gobernadores de la detección de partículas de uranio natural de origen antropogénico en un lugar del que Irán no había avisado a la agencia.
Feruta instó a Irán a trabajar con el OIEA para resolver el asunto y cooperar plenamente con la agencia en la implementación de su Acuerdo de Salvaguardias y Protocolo Adicional.
El Grupo 5+1 (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania) e Irán firmaron en 2015, tras varios años de negociaciones, el PAIC, que imponía ciertas limitaciones al programa nuclear iraní para excluir su dimensión militar, a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.
En mayo de 2018, Washington rompió el pacto y activó varias baterías de sanciones contra Irán con el argumento de que ese país seguía desarrollando armas nucleares.
Un año después de la retirada de EEUU, Irán comenzó a recortar gradualmente el cumplimiento de sus compromisos nucleares ante la falta de avance del resto de países signatarios para contrarrestar las restricciones norteamericanas.