"Al debatir el tema de los vuelos de las aeronaves rusos sobre el mar del Japón el 23 de julio de este año, la parte rusa declaró que, de acuerdo con la información de control objetivo, no hubo violaciones del espacio aéreo de los países extranjeros, los pilotos rusos actuaron estrictamente de conformidad con las disposiciones del derecho internacional", dice el comunicado.
Además, los diplomáticos intercambiaron opiniones sobre la agenda bilateral y la situación en la península de Corea.
Oficiales del Estado Mayor Conjunto (EMC) de Corea del Sur informaron el 23 de julio que un avión de alerta temprana A-50 ruso realizó dos incursiones de tres y cuatro minutos de duración en el espacio aéreo surcoreano sobre el mar del Este (mar del Japón) cerca de las llamadas rocas de Liancourt, cuya soberanía es disputada por Seúl y Tokio.
La Fuerza Aérea surcoreana envió al encuentro del intruso aviones de combate F-15K y F-16K que, además de lanzar bengalas, supuestamente realizaron hasta 360 disparos de advertencia, según un oficial citado por la agencia Yonhap.
Según el EMC, esta incursión se produjo poco después de que dos aviones chinos entraran en la zona de identificación de la defensa aérea de Corea del Sur, luego salieran y volvieran a entrar junto con dos aviones Tu-95MS rusos.
Con respecto a la zona de identificación de la defensa aérea de Corea del Sur, el ente castrense ruso sostiene que no está prevista en las leyes internacionales y se estableció de forma arbitraria.
La portavoz de la Cancillería china, Hua Chunying, afirmó que la mencionada zona no forma parte del espacio aéreo de Corea del Sur, por tanto todos los países tienen derecho y libertad para volar allí.