"Hay contratos, hay servicios de mantenimiento del material ya suministrado, cualquier trabajo implica cierto personal, a veces más y a veces menos. Cuando haga falta, enviaremos más gente, la que sea necesaria", dijo Schetinin a la pregunta de si Moscú podría aumentar el número de los técnicos militares que se encargan del mantenimiento de equipos en Venezuela.
El diplomático agregó que "todos volverán, si esa cantidad resulta innecesaria".
"Es una cuestión estrictamente técnica, relacionada con la ejecución de contratos específicos y obras específicas", apuntó.
"Desde luego, estamos contribuyendo en el marco de esta cooperación, ante todo en lo que concierne a la medicina, equipos médicos, etcétera. Seguimos trabajando. Abonamos nuestras cuotas a los organismos internacionales que gracias a ello compran y suministran nuestros equipos", explicó.
Con respecto a una nueva ronda de negociaciones entre representantes del gobierno y la oposición de Venezuela en Oslo, Schetinin dijo que "por lo que sabemos, está prevista para la semana próxima".
"Habría que preguntarlo a mediadores noruegos, no a nosotros", aclaró. "Nos consta que de su parte hay una petición importante, y es fundada, de que los contactos se desarrollen en un ambiente tranquilo, sin mucho alboroto. Lo entendemos completamente", dijo.
Asimismo, Schetinin declaró a Sputnik que Moscú respalda cualquier iniciativa de mediadores internacionales que contribuya al diálogo interno en Venezuela.
En este contexto, reafirmó la postura de Rusia de que los mismos venezolanos son los que deben encontrar una solución de la crisis, "sin injerencia destructiva ni tampoco intervención militar o presión".
Schetinin, además, comentó la participación de los delegados venezolanos en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF).
"Han tenido su propia agenda, han trabajado por fomentar nuestra cooperación en diferentes ámbitos, incluido el económico y comercial", señaló.
El diplomático añadió que Rusia mantiene "un contacto permanente con los amigos venezolanos".
El 23 de enero, dos días después de que el Tribunal Supremo anulara su designación, el legislador se autoproclamó "presidente encargado" del país.
Nicolás Maduro calificó la autoproclamación de Guaidó de intento de golpe de Estado y responsabilizó a EEUU de haberlo orquestado.
Guaidó fue reconocido de inmediato por EEUU, a los que se sumaron unos 50 países.
Rusia, China, Cuba, Bolivia, Irán y Turquía, entre otros países, siguen apoyando al Gobierno de Maduro.
