"Estas acciones de EEUU son un juego con fuego, un grave obstáculo para el desarrollo de las relaciones chino-estadounidenses, así como para la paz y la estabilidad en la región", dijo Wu a la prensa.
Señaló que Taiwán es parte de China, se trata de un asunto interno de China y los sentimientos nacionales de los chinos.
A finales de marzo pasado, el Gobierno chino envió una nota de protesta a EEUU después de que su destructor USS Curtis Wilbur y la lancha patrullera USCGC Bertholf atravesaran el estrecho de Taiwán.
Washington aseguró que el paso fue una demostración de su compromiso con un Indo-Pacífico libre. Además, en mayo los consejeros de seguridad de EEUU y Taiwán mantuvieron un encuentro.
Las relaciones oficiales entre el Gobierno central chino y Taiwán se interrumpieron en 1949, cuando el movimiento nacionalista Kuomintang tomó la isla tras ser derrotado durante la guerra civil por el Partido Comunista Chino.
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Las relaciones entre ambos territorios chinos solo se restablecieron a nivel empresarial e informal a fines de la década de 1980, sin que existan en la actualidad contactos oficiales entre las autoridades.
